una tarde estaba aburrido en uno de esos canales de IRC que suelo frecuentar en los solsticios, cuando apareció uno de esos personajes que abundan por ellos, preguntando si alguien quería ver como su sumisa se desnudaba a través de webcam.. tal anuncio provocó las risas de los veteranos, ya que lo primero que piensas es que va de cachondeo o que se trata de propaganda de algun sitio web porno.. no obstante, él insistía en que la oferta era totalmente seria...lo ignoramos
al rato me abre un privado, volviéndome a explicar que era cierto y que se sentía ofendido... no tenía otra cosa que hacer, así que le dí mi número de teléfono del msn messenger, y me dispuse a esperar la llamada
enseguida llegó la misma... era él, y me pedía que esperara, por lo que mi escepticismo aún creció más. siguieron las explicaciones: la sumisa no quería. volví a sonreir y ya empecé otras cosas que hacer por que ya veía que todo era una falsa
se unió una tercera persona a la conversación: era ella.. así que parecía que algo de verdad podría haber después de todo. él la trató duramente, por sus dudas y por no saludarme correctamente, ya que le dejaba en mal lugar, como si no hubiera sabido educarla...
las siguientes frases que él dijo fueron para que ella conectara la cámara. así lo hizo y pude ver a una joven ostensiblemente nerviosa, vestida por completo, y que permanecía sentada frente al ordenador. él me iba preguntando qué me parecía su puta, si me gustaba, y comentaba cómo la iba a domar para hacerla obediente.. yo respondía vagamente, mirando las ventanas abiertas, pensando sobre el cariz de los acontecimientos
él le mandó que empezara a despojarse la ropa... no pasó nada... seguro que su discusión seguía por privado. finalmente ella se quitó el jersey... la falda... lentamente, con desgana, con cara de asco y desprecio... nueva detención... yo miraba, sin disfrutar especialmente de la situación... volvió a dejarse ver por la cámara, para quitarse rápidamente el sujetador y las bragas, tapándose púdicamente con las manos...
él volvió a la carga con sus observaciones al respecto de ella, humillándola aún más: parecía a punto de llorar. le dije que ya era suficiente, que ya estaba bien. él se sintió complacido y le ordenó que se desconectara. ella se despidió rápidamente y se fue. la conversación por su parte continuó por el mismo camino. yo sólo le dije una cosa: que podía estar contento con ella, por el esfuerzo que ella había hecho para vencer su orgullo y por su voluntad de entrega, pero que tuviera en cuenta que ésta no se gana con amenazas, sino de formas más sutiles, y que de persistir en ese plan la perdería.. esto no le gustó, lógicamente, y se fue de malos modos...
unos días más tarde me enteré de que efectivamente, ella había buscado la libertad